AXUM es heredero de la leyenda, pero también de reinos históricos como el de DAAMAT (VII-III AC) que tuvo como capital la ciudad de YEHA en TIGRAY; cerca de donde, un par de siglos más tarde, se levantará la ciudad de AXUM con sus singulares obeliscos de piedra labrada y que acuñará monedas con las efigies de sus reyes. El más grande de ellos, EZANA será convertido al cristianismo el 333 DC por FRUMENCIO, el primer obispo etíope. Dos años más tarde AXUM destruye MEROE, su rival en la zona, y se impone como potencia comercial monopolizando las ricas exportaciones de productos africanos al mundo árabe, persa e incluso a la India y Ceilán, las especias y el incienso de Arabia suponen los productos más preciados que llegan a través del puerto de ADULIS a Egipto y a Bizancio con el que se establece una respetuosa relación.

EL LEÓN DE JUDÁ gobierna el pueblo HABASHA: los TIGRÉS (de la región etíope del TIGRAY donde está AXUM), los AMHARAS, GURAJÉS y HARIRIS. Unidos en torno al NEGUS NEGUSTI el "rey de reyes" forman la población de un reino que se extenderá a ambos lados del MAR ROJO demostrando un empuje cultural capaz de fundir influencias lejanas en el tiempo y en el terreno para hacer surgir una cultura original, un cristianismo africano que se expresa en GE´EZ, lengua litúrgica con una rica literatura en la que se conservaron textos únicos como el libro de ENOCH o el Apocalipsis de ESDRAS.

AXUM es heredero de la leyenda, pero también de reinos históricos como el de DAAMAT (VII-III AC) que tuvo como capital la ciudad de YEHA en TIGRAY; cerca de donde, un par de siglos más tarde, se levantará la ciudad de AXUM con sus singulares obeliscos de piedra labrada y que acuñará monedas con las efigies de sus reyes. El más grande de ellos, EZANA será convertido al cristianismo el 333 DC por FRUMENCIO, el primer obispo etíope. Dos años más tarde AXUM destruye MEROE, su rival en la zona, y se impone como potencia comercial monopolizando las ricas exportaciones de productos africanos al mundo árabe, persa e incluso a la India y Ceilán, las especias y el incienso de Arabia suponen los productos más preciados que llegan a través del puerto de ADULIS a Egipto y a Bizancio con el que se establece una respetuosa relación.